9. El Desencadenamiento

Esta vez me tocaba a mí recorrer aquella Mansión en busca de Yuu. Aparecí tumbada dentro de la celda colgante. Salí de aquella celda y atravesé la primera puerta que vi. De pronto, aparecí en el jardín, fui por el lado izquierdo y cuando pasé cerca del otro corredor, una niña me hizo una reverencia. Por lo que deduje, que en el otro lado ocurriría lo mismo y así fue. Fotografié a las dos niñas y fui directa hacia la puerta por la que Yuu cruzó.

Cuando intenté abrir la puerta, apareció un Hombre oculto con un gran cuchillo que iba a por mí. No tenía experiencia contra él, pero recordé los métodos que utilizó Miku para acabar con él. Por lo que hice lo mismo y después de unos combos, ya acabé con él.

Me dejó una fotografía con un lugar claro que ya conocía, por lo que me dirigí hacia allí. Pero opté por ir por el pasillo de la valla para ir al cuarto de proyecciones y así coger hierbas y carretes. Después me dirigí al cementerio, cuando en el vestíbulo de la ventana redonda noté una presencia arriba y enfoqué la cámara para capturar otro espíritu (Si jugara por segunda vez).

Atravesé el cementerio y me dirigí hacia la izquierda en el pasillo de manchas ya que cuando crucé la esquina, apareció fugazmente otro espíritu que pude fotografiar. Después de aquello, oía voces extrañas que venían de dentro. Pero no había forma de entrar, pero vi una pequeña trampilla por la que se podía acceder. Después del primer intento, escuché como alguien se quitó la vida y al segundo intento, entré a un pequeño habitáculo.

El Hombre que previamente me había atacado, yacía en el suelo en medio de un charco de sangre. Me inquietaba aquella presencia allí, pero estaba segura que no volvería a levantarse. Le hice una foto y así rompí el sello de la puerta del jardín. Al lado de él había una trampilla que abrí y obtuve un mapa marcado y el accesorio "Cambiar". Después de leer y comprender el nuevo material, salí de aquel lugar.

El sello de la puerta del jardín había sido desbloqueado, por lo que tenía que ir hacia allí. Pero no lo hice, mi instinto me decía que tenía que descubrir aun más sobre aquella Mansión.

Fui por la portezuela que había en el pasillo y cogí más hierbas, salí y me dirigí hacia las escaleras. Subí las escaleras y me dirigí hacia el cuarto de la persiana, donde había tenido tantos encuentros con Yoshino.

Accedí y recogí del bulto humanoide de dentro de las cortinas, el Cuaderno Calicó 2. Al terminar de leerlo, apareció alguien para "saludarme". La Cabeza de Familia Kuze apareció y se mostraba enfadada.

Como recordaba el combate que tuvo Miku contra ella, me fue fácil adivinar sus movimientos y dispararle buenos disparos Cero en las mejores oportunidades. Por lo que terminé con ella antes que me diera cuenta.

Salí de aquella habitación, bajé las escaleras y accedí al cuarto partido. Donde fotografié a Yoshino que parecía agobiada como de costumbre. Después de aquello me fui al vestíbulo principal. Donde me apareció una abuelita con un carro, parecía inofensiva pero ya no me fiaba de ningún espíritu. Por lo que saqué la cámara y esperé a que me envistiera, para soltarle un Fatal Frame. Acabé enseguida con ella, era débil pero no me fiaba.

Como premio, la abuela me dejó la Llave Flecha Muesca, con la que podía abrir las rejas que habían en la entrada de la Mansión. Por lo que allí me dirigí y accedí al pasaje secreto donde recogí un Espejo de Piedra. Al final de pasaje, encontré una puerta por la que accedí al cuarto donde estaba Yoshino.

Volvió a atacarme junto a sus sombras, pero había tenido tantas veces ese combate, que me resultó sumamente sencillo acabar de nuevo con ella.

Al derrotarla, me dejó una sorprendente foto suya y el accesorio "Medir". Accesorio que era esencial, ya que me permitía ver los puntos de salud de los espíritus.

Allí ya no tenía nada que hacer, por lo que volví sobre mis pasos. Tenía que ir al jardín, por lo que la forma más rápida era ir al vestíbulo con tatami. Hacia allí me dirigí, me encontré con la pajera Madre-hija, pero las dejé y seguí adelante. Llegué al vestíbulo, donde recogí como siempre el carrete que había en el cuarto anexo.

De nuevo, no fui hacia el jardín. Mi intuición me decía que tenía que seguir investigando, por lo que me dirigí hacia el recibidor de cuerdas de la Mansión Himuro. Donde recogí hierbas en el vestíbulo y después tenía que acceder hasta el palacio de cuerdas. Donde una vez allí, fotografié la plataforma y obtuve otro negativo para rebelar. Después de aquello, regresé al recibidor de cuerdas donde noté una presencia arriba del espejo del fondo. Fotografié a una mujer que caía y que posteriormente me atacó.

Como había visto el duro combate que había tenido con Miku, me conocía sus peligrosos movimientos. Pero también sabía que cuando atacaba de frente, podía dispararle varios combos seguidos. Por lo que con unas lentes y demás, fue fácil eliminarla.

Después de esto, cogí la puerta de la izquierda y me dirigí hacia el cuarto futón. Donde abrí el armario que había en el fondo y vi la cara de una extraña mujer, por lo que la fotografié rápidamente. Así que apareció una mujer reptante. El combate era muy fácil, ya que tenía mucho espacio y buena visibilidad. Cuando se acercó a mí y brilló el obturador, no tuve compasión con ella. En el último disparo que le di, me dejó otro negativo interesante.

Allí ya no había nada que hacer, por lo que volví al recibidor de la Mansión Himuro para luego salir por la puerta de la derecha y al cruzar la esquina, coger la puerta de la derecha. Donde accedí al cuarto de la persiana, esta vez estaba abierta. Por lo que accedí y recogí de la mesilla el Cuaderno Calicó 1 y la Lente "Cero" una lente que ya conocía por la efectividad que le dio a Kei. Salí de aquellas cortinas y recogí de detrás de biombo de la izquierda las hierbas.

Por fin, accedí al jardín por la misma puerta que había en aquella habitación a la izquierda. Una vez allí, el misterioso Hombre oculto que se había suicidado, me volvió a atacar.

Ya tenía experiencia con él, por lo que esperé como siempre a su primera cuchillada para que brillara el obturador y así asestarle varios combos. Ahora sí, acabé con él.

Finalmente entré por la doble puerta. Me encontraba en un lugar extraño, una niebla, una brisa... que tenían algo fuera de lo normal. Seguí adelante y vi a unas mujeres aguja junto a la puerta de un santuario. Las fotografié y seguí adelante hasta que me desperté de nuevo en mi cama.

El tatuaje me preocupaba bastante, me llegaba ya hasta las piernas y cada vez tenía más y más dolor.

Bajé a rebelar las fotos que tenía, no hice caso del teléfono. Dejé que sonara. Cuando las rebelé, fui a coger el teléfono. Nadie me contestó, pensaba que era Miku, pero solamente oía una voz de una mujer de fondo, mis alucinaciones iban en aumento.

Sonó otra vez el teléfono, lo cogí, pero esta vez era Kei. Después de hablar con él, volví a mi cuarto. Una vez ya era de noche, bajé al cuarto de baño ya que mi intuición me decía que algo ocurriría. Y así fue, vi el espejo manchado de unas manos ensangrentadas. Saqué la cámara para tomar una foto y apareció la mujer aguja, por lo que fotografié a la mujer con las manchas de sangre.

Después de la increíble alucinación que sufrí, me dirigí al cuarto de Miku para entregarle más fotos y que me diera más información. Fui, le di las fotos y me dio un artículo periodístico y un libro. Después de aquello, fui de nuevo al cuarto de Yuu, a ver si tenía más libros que pudieran interesarme. Y así fue, recogí el Cuaderno "El Palacio del Sueño" y de la estantería el Libro "La Sacerdotisa".

Terminé de leer y de comprender los nuevos artículos, así que fui a acostarme.

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